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INFORMACIÓN

AUTOEXPLORACION DE LOS SENOS

INTRODUCCION

La glándula mamaria de la mujer sufre cambios durante la vida, dichos cambios pueden ser causados por factores tales como: la edad, el embarazo, la lactancia, el uso de pastillas anticonceptivas (hormonas), la menopausia, golpes, traumatismos, etc.

Debido a que las mujeres detectan por si mismas la mayoría de las irregularidades (“bolitas”, “secreciones”, “masas”, “tumores”) que aparecen en sus senos, usted debe aprender a autoexaminarse a partir de los 25 años de edad una vez al mes (tres a cinco días después de la regla), de esta manera estará en posibilidad de detectar oportunamente cualquier cambio en la forma, volumen o consistencia de sus senos.

El principal objetivo será la familiarización con las características propias de las glándulas mamarias y después la búsqueda de anomalías que requieran consulta profesional.

En México solo se detecta el 30% del cáncer en forma temprana. Esto es por la falta de la autoexploración y el no realizarse un estudio de ultrasonido mamario antes de los 40 años y una mastografía cada año después de los 40.

Por las características anatómicas propias de los senos pueden palparse irregulares aun sin tener lesiones, por ejemplo: unos días antes de que empiece su periodo menstrual y en ocasiones durante el mismo. Usted puede tener aumento de la tensión, dolor “bolitas” en los senos, debido a la acumulación de líquidos entre los tejidos; esto es completamente normal en estos días.

Si usted se encuentra en la menopausia le recomendamos efectué la autoexploración el primer día de cada mes.

A continuación encontrara, en cuatro pasos básicos, una guía sencilla para la autoexploración de los senos.

GUIA PARA LA AUTOEXPLORACION (PASO A PASO)

PASO 1 Inspección de las mamas

En este primer paso, usted podrá detectar algunas alteraciones de los senos. Párese frente a un espejo descubierta desde la cintura para arriba con los brazos relajados a lo largo del tórax y posteriormente levantados por encima de los hombros. Revise cada seno para detectar anormalidades (asimetría muy marcada en el tamaño de ambos senos, ulceraciones, secreción por el pezón, retracciones, hundimiento de pezones, arrugas o descamación de la piel). Cada vez que usted examine sus senos, se familiarizara con su apariencia y textura.

No es raro que un seno sea un poco más grande que otro.

PASO 2 Exploración del pezón

En este paso es ver las características de los pezones, que sean simétricos, que no estén hundidos, que no tengan ulceraciones y que no exista secreción con pus o sangre al apretar suavemente cada pezón.

PASO 3 Palpación parada

Colocándose de pie y erguida, eleve el brazo izquierdo por atrás de la cabeza, con la yema de los dedos de la mano derecha, revise el seno izquierdo y área colindante, firme y cuidadosamente. Puede realizarlo en forma de pequeños círculos del pezón hacia fuera, de afuera hacia el pezón y de arriba hacia abajo.

Busque la presencia de masas o “bolitas” anormales. No olvide palpar la región axilar en búsqueda de crecimiento de ganglios.

Repita el procedimiento en el otro seno.

PASO 4 Palpación acostada

Repetir el paso 3, pero acostada.

Acuéstese boca arriba y coloque una almohada o una toalla por debajo del hombro izquierdo, coloque el brazo izquierdo sobre la cabeza, esto permite que la glándula se extienda y se desplace sobre el tórax, lo que facilita la exploración.

Realice la misma secuencia descrita en el paso 3 y repita en el lado derecho.

La autoexploración de los senos se debe hacer cada mes 5 días después de la regla y durante el baño, ya que la piel enjabonada permite un mayor desplazamiento y sensibilidad en las yemas de los dedos.

Es indudable que la práctica rutinaria del autoexamen, que solo emplea unos minutos de cada mes, será en beneficio personal al descubrir casos incipientes de cáncer mamario.

Durante la palpación de la mama nunca se siente lisa, como es un tejido glandular, se tiene que sentir irregular y “raro”, sobretodo en las partes altas y laterales. El acudir con el ginecólogo es precisamente decirle a cada paciente las características “normales” y propias de la mama y enfatizar que cuando sientan diferencias acudan inmediatamente con nosotros.

El cáncer de mama es el segundo cáncer más frecuente en la mujer en México, sin embargo, gracias a los avances médicos, científicos y técnicos, se ha conseguido que aumenten los índices de supervivencia de la mujer con este padecimiento cuando se diagnosticada a tiempo. Si usted percibe alguna anormalidad, no dude en consultarnos.

Recuerda que la autoexploración de los senos te puede salvar la vida